Tras el inicio de la intervención de la Nueva EPS por parte de la Superintendencia Nacional de Salud, Jesús Alberto Rincón Ramírez fue designado como agente interventor.El superintendente Luis Carlos Leal citó una rueda de prensa en la que enfatizó la necesidad de salvaguardar los recursos de la salud y garantizar el derecho fundamental a la atención médica. Afirmó que en respuesta a las “graves irregularidades financieras”, tanto en Sanitas como en la Nueva EPS, se tomó la medida de ‘intervención especial forzosa administrativa’. “En el proceso de designación del nuevo interventor, que actualmente está a cargo de una entidad que no puede cesar sus funciones debido a su importante responsabilidad, el doctor Jesús Alberto Rincón Ramírez ha sido designado como interventor especial por parte de la Superintendencia Nacional de Salud”, afirmó Leal.Según declaraciones del superintendente, tanto la Nueva EPS como Sanitas no cumplen con los requisitos financieros necesarios para operar, como un patrimonio adecuado y un régimen especial de reservas técnicas. Aseguró que estos incumplimientos se reflejan en un aumento significativo de las quejas y reclamaciones por parte de los afiliados.Leal dijo que se observó un incremento exponencial en las deudas de estas entidades con las IPS en todo el país.La medida de intervención implica la remoción de los representantes legales y la junta directiva de ambas EPS, con el objetivo de administrar y corregir las irregularidades detectadas.La intervención, según Leal, lejos de ser punitiva, tiene un carácter preventivo. Se busca evitar la liquidación de estas entidades, una medida que históricamente ha demostrado ser ineficaz y que ha llevado a la quiebra de numerosos hospitales en el país, afectando gravemente a los pacientes.“Estas intervenciones no significan que se vaya a despedir a ninguna persona que trabaja dentro de la EPS. Esto no significa que se vaya a liquidar ninguna de las EPS. Tampoco significa que se vaya a vulnerar o afectar los contratos con los prestadores o la prestación de servicios de salud para la población colombiana”, afirmó Leal.Para garantizar la continuidad de la atención médica, la Supersalud creó una junta asesora del interventor, conformada por los principales acreedores de cada EPS. Esta medida adicional tiene como objetivo proporcionar orientación y apoyo durante el proceso de intervención.El director general de la ADRES, Félix León Martínez, dijo: “Tengo que aclarar que las EPS intervenidas por la Supersalud no tienen cambio con respecto a la forma de pagos que maneja el sistema. El ADRES gira mensualmente las EPS por todos sus afiliados de la misma forma y el único cambio hacia adelante que hay en las EPS intervenidas es la obligación de que hagan mensualmente giro directo a clínicas, hospitales y proveedores”.“Todas las EPS intervenidas tienen que hacer los giros públicos y transparentes a través del ADRES. Son los mismos dineros, solo que no hay discrecionalidad en manejarlos, sino que tienen que hacerlos públicos, asegurando que el 80 por ciento de ellos sean girados todos los meses a través de la ADRES y sean publicados quién recibe cada peso que le corresponde a esa EPS intervenida”, agregó Martínez.