En una sesión de la Comisión de la Cámara de Representantes, la congresista del Partido Verde, Catherine Juvinao, protagonizó un intenso debate con el director de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo de Desastres (UNGRD), Carlos Carrillo. Durante su intervención, Juvinao reveló tres nuevos casos de corrupción en la UNGRD.
El primero de los casos denunciados se refiere a un contrato de jagüeyes para Uribia, La Guajira, que comenzó con un presupuesto de $4 mil millones y se disparó hasta $75 mil millones. “Este contrato se firmó en plena campaña electoral de 2023 y aún no se ha pagado a los contratistas”, afirmó Juvinao. Según la legisladora, se contrataron 1.300 pozos de agua para una población de solo 160 mil habitantes. La congresista señaló que los “padres políticos” de Uribia, el alcalde Jaime Luis Buitrago y el exalcalde Bonifacio Henríquez, ambos conservadores, están vinculados políticamente a Carlos Andrés Trujillo, un aliado del presidente Petro.
Juvinao también destacó que la empresa interventora, Intraffic SAS, es “fantasma” y está presuntamente relacionada con Sneyder Pinilla, exsubdirector de la UNGRD. Esta empresa, creada con un patrimonio de $5 millones, recibió contratos por casi $6 mil millones sin un proceso de licitación adecuado y no tiene oficinas en Barranquilla.
El segundo escándalo mencionado por la congresista involucra el alquiler de 222 carrotanques. Los contratos fueron otorgados a tres contratistas sin experiencia y con interventorías fantasmas. Juvinao denunció que en un mismo departamento se encontraron hasta tres valores diferentes para el alquiler de los carrotanques, que oscilan entre $1 millón y $1,8 millones. “¿Dónde están esos carrotanques alquilados? No aparecen. ¿O dónde está esa plata?”, cuestionó la congresista.
Finalmente, Juvinao denunció la contratación de 23 personas para capacitaciones en gestión de riesgos en municipios. Según la congresista, estas capacitaciones no se realizaron sino hasta dos meses después de terminado el contrato y se llevaron a cabo a través de la plataforma Meet. Además, señaló que solo tres de las personas contratadas eran funcionarios de planta, sugiriendo que los otros contratados eran “corbatas” pagadas para beneficiar a ciertos congresistas.
Estas denuncias ponen de manifiesto graves irregularidades en la gestión de recursos y contratación dentro de la UNGRD, generando preocupación sobre la transparencia y eficiencia en el manejo de fondos destinados a la gestión de riesgos en Colombia.