El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), bajo la dirección de Astrid Cáceres Cárdenas, ha hecho un llamado a las comunidades afro de La Guajira a establecer un diálogo constructivo y a evitar medidas de hecho, como el bloqueo del ingreso a la sede regional en Riohacha.
Esta invitación se enmarca dentro de la estrategia del Gobierno del Cambio, que busca fortalecer la concertación con las comunidades en la atención de la primera infancia.
Cáceres Cárdenas enfatizó en la importancia de llegar a acuerdos que faciliten la contratación de servicios destinados a niñas y niños en la región. “La concertación con las comunidades es una premisa del Gobierno del Cambio, por eso le reiteramos a las organizaciones sociales en este departamento nuestra disposición a conversar”, afirmó la directora general del ICBF.
Como parte de este esfuerzo para fomentar el diálogo, se anunció que la Defensoría del Pueblo asumirá el rol de mediadora entre el ICBF y las comunidades afro, facilitando así el avance en las negociaciones que permitirán iniciar el proceso de contratación de asistencia para la infancia.
Con el fin de no interrumpir los servicios de prevención y protección, el ICBF informó que su sede regional atenderá de manera virtual hasta el próximo lunes. La institución subrayó que la garantía de derechos de las niñas, niños, adolescentes y familias en La Guajira es una prioridad fundamental.
El ICBF espera que, mediante el diálogo y la colaboración, se pueda lograr un acuerdo que beneficie a la población infantil de esta región, esencial para el desarrollo integral de las nuevas generaciones.