A pocos días de haberse terminado el festival de San Juan del Cesar, La Guajira, se conoció la polémica por una canción que fue presentada por el ministro de Educación, Daniel Rojas Medellín, porque fue considerada por uno de los jurados como “vulgar”.
Según el folclorista Luis Hinojosa, le dio un puntaje bajo porque el ministro usó la palabra “polvo” y eso le pareció fuera de tono. “La canción trata de una pareja que abandona el hombre y dice algo como que no iba a tener el mismo polvo y eso me pareció vulgar”, explicó el jurado.
Dijo que nunca supo que esa canción era del ministro, hasta que lo llamaron un magistrado y un juez, a preguntarle por qué la había eliminado. “Me dijeron que les había dañado el viaje al festival que tenían planeado con una comitiva y el ministro”, precisó Hinojosa.
El ministro, Daniel Rojas Medellín, explicó en sus redes sociales que es un apasionado del folclor vallenato por la herencia que le dejó su abuela, una mujer guajira que influyó en su formación.
“Siempre sentí que las historias que de niño mi abuela me contaba sobre su región tenían una relación intrínseca con los cuatro aires, como si ella sin proponérselo, las ambientara con música de acordeón”, expresó.
Explicó que varios amigos lo convenciones para que enviara un “intento de canción que desde hace años tenía por ahí, al festival de San Juan, solo para sentirme parte, como queriendo y no queriendo, amarrado por las cadenas que impone un cargo que asfixia la humanidad y que se ciñe a la acartonada rigidez centralista de las buenas formas donde el vallenato es vulgar por antonomasia pero liberando al espíritu insubordinado que reivindica mi niñez y la figura de mi abuela, sin mayores pretensiones, como alguien que disfruta de su hobbie”.
Igualmente contradijo todo lo que se ha dicho por ahí y precisó que “dijo un periodista que era una letra vulgar, se inventó una divertida historia que incluye una casa de recreo que para su infortunio no conocí ni sé de dónde la sacó porque -para frustración mía- jamás estuve en el festival, no porque no hubiera querido sino por las ocupaciones que me impone el cargo. Debo decir que han sido divertidas la cantidad de cosas que ha inventado alrededor de la historia. Ya Escalona había advertido sobre la lengua sanjuanera y aunque se trata de un periodista opositor con el que he confrontado ideas políticas, prefiero entenderlo con la picardía propia del folclor donde son varias las historias de gente que se quiso hacer célebre a partir de la mala fe y les cayó la gota fría!”.