Dos uniformados de la Policía Nacional fueron sorprendidos por el Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (GAULA) en un intento de extorsión a un comerciante del municipio de Soacha, Cundinamarca.
Esto ocurrió a mediados del año pasado cuando el agente Miguel Mauricio Reyes fue detenido con el agente Diego Alberto Muñoz, tras ser sorprendidos por sus compañeros.
Miguel Mauricio habría ingerido un billete de $100.000 y ocho de $50.000 antes de descubrirles la coacción, haciendo que fuera trasladado al hospital más cercano para extraerle este material que ponía en riesgo su salud.
El caso se registró en un video difundido por las redes sociales, el cual generó cuestionamientos sobre la transparencia de estos funcionarios realizando su labor, ya que esto muestra presunta corrupción en el trabajo público de las instituciones.